No había hecho esto antes y estaba consciente de que fabricar una nota no es el mejor ejercicio periodístico: es válido usar los recursos de la narrativa y de eso se trataba, pero no partir de una ficción. Aún así, asumí el riesgo y el resultado fue muy interesante. Destaco estos elementos:
- La mayoría de las notas leídas al final del ejercicio demostraron que el grupo tenía muchas más habilidades para contar historias -traduzco aquí: hacer un mejor periodismo- de lo que se percibe en el diario para el que escriben, generalmente gris y plano, lo cual nos lleva a entender que la carencia principal aquí recae en los editores y la línea editorial, mientras que al taller asistían reporteros en su mayoría.
- El reconocimiento de que en principio se trataba de una fabulación llevó a algunos a escribir en pasado. La historia en estos casos dejaba de sentirse como un trabajo periodístico y se diluía en una especie de cuento mal escrito con un tono dizque literario. Habría que dejar bien asentado que en general el pasado en periodismo debería usarse solo cuando se ha comprobado que la historia no puede escribirse en presente.
- En esa misma tónica, en más de un caso --lo cual tiende a suceder, haya ficción o no-- la adjetivación y algunos giros demostraron que el reportero/narrador se sentía con una libertad excesiva para contar la historia a su modo y se percibe esa entrada en el campo de la fabulación y el lenguaje falsamente literario. Es muy importante hacer énfasis en que el uso del estilo narrativo no implica renunciar a la narración objetiva y la mejor manera de contar sigue siendo ceñirse a los hechos.
- El resultado más interesante, sin embargo, fue que la "fabricación" de la nota pasó pronto a un segundo plano. Las historias mejor contadas le dieron tal vida al personaje central (una modelo local candidata a Miss Universo, única sobreviviente de un avionazo cuando viajaba a la competición mundial en Río de Janeiro), que se podía sentir en la sala el dramatismo y la empatía de los reporteros con Elizabeth Padilla, quien a sus veintiún años ha "vuelto a nacer" y valora su vida de una manera muy diferente.
- Esta sensación de compartir el destino de un ser humano superó incluso las barreras de la ficción literaria para instalarse en la conciencia de los presentes en el taller como si se tratara de un personaje real, lo cual no hace sino demostrar el diferente impacto que puede tener el uso del periodismo narrativo respecto al periodismo tradicional basado en el estilo noticioso o periodístico.
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